Opinión de Mg. Soledad Morales| Formación y ejercicio en ciudadanía: el rol desde la universidad para ampliar la calidad de nuestra democracia

Existe consenso respecto a que la democracia ha trascendido su definición como forma de gobierno, pasando a transformarse en un valor y característica deseable en la toma de decisiones públicas y colectivas, encontrándose asociada a otros atributos tales como: transparencia, rendición de cuentas y participación. La conjunción de estos elementos, está asociada a la modernización y al perfeccionamiento de la democracia. A su vez, el desarrollo de estos atributos se relaciona con una mayor legitimidad, eficacia política y confianza en los procesos democráticos.

Estos atributos o caracteres, no se generan de manera espontánea, sino que requieren espacios de formación y fomento, siendo de tal relevancia que, se ha llegado a plantear que su inexistencia es sinónimo de ausencia de democracia. De este modo, la participación ciudadana tiene un rol de trascendental importancia, sobre todo en tiempos de crisis de legitimidad, de representación y de desafección política como los que vivimos.

Es importante relevar el rol de la universidad pública de formar ciudadanos y ciudadanas socialmente comprometidos, sea directa o indirectamente, capaces de involucrarse en los problemas colectivos y de ser parte de los procesos políticos y de gobierno, contribuyendo a una vinculación ciudadana desde la diversidad de opiniones, en la esfera nacional, local y territorial. Esto, dado que el paradigma ha cambiado y ya no es suficiente con recurrir a la ciudadanía sólo cuando hay elecciones, permaneciendo en inmovilidad en los períodos entre elecciones, demandándose un mayor involucramiento en los procesos desde la propia ciudadanía.

Hemos vivenciado a través del proceso constituyente que, la participación de la ciudadanía no sólo es relevante, sino que es necesaria para construir decisiones que sean sustentables, y que puedan permanecer en el tiempo, ya que, se incrementa el compromiso con las decisiones y, a la vez, con el resto de la ciudadanía, desarrollando la capacidad de poder solucionar los conflictos que pueden acontecer y aportando a la consolidación de la democracia.

Fuente: Voces Ciudadanas UFRO.

Mg. Soledad Morales Trapp, directora de la carrera de Derecho.

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